Wednesday, December 16, 2009

Me declaro en huelga... no quiero cocinar

No estoy deprimida ni de mal humor... sólo estoy cansada.

Dicho lo anterior, me limitaré a la cena de Año Nuevo u ocasiones especiales, el resto de los días que quedan del 2009 -sobre todo aquellos en que tenga que ir a la oficina-, consumiré comida pre-fabricada o algo así.

Friday, October 30, 2009

02/05/57 - 15/10/88

"People have stars, but they aren't the same. For travelers, the stars are guides. For other people, they're nothing but tiny lights. And for still others, for scholars, they're problems. For my businessman, they were gold. But all those stars are silent stars. You, though, you'll have stars like nobody else."

"What do you mean?"

"When you look up at the sky at night, since I'll be living on one of them, since I'll be laughing on one of them, for you, it'll be as if all the stars are laughing. You'll have stars that can laugh!"

And he laughed again.

"And when you're consoled (everyone is eventually consoled), you'll be glad you've known me. You'll always be my friend. You'll feel like laughing with me. And you'll open your windows sometimes just for the fun of it... And your friends will be amazed to see you laughing while you're looking up at the sky. Then you'll tell them, 'Yes, it's the stars. They always make me laugh!"
Antoine de Saint-Exupéry
Still miss you…owner of my October's blue sky and cold wind... lady of my stars.


Wednesday, October 14, 2009

16/07/57 - 14/10/99


Algunas ausencias duelen, algunas otras curan, otras sólo entristecen.
Algunas ausencias dan paz, otras tantas enloquecen, la mayoría deja un espacio indescriptible.
Algunas ausencias queman el alma mientras otras la congelan. Algunas detienen el tiempo y otras hacen viajar a través de él.
Algunas limitan y otras liberan.
Algunas son acompañadas por suspiros y otras por ansiedad.
Pero la tuya me hace sentir todo esto al mismo tiempo, esa es la que no puedo superar, es la más importante.



Friday, October 9, 2009

Buscaba en la televisión algo para pasar el rato antes de dormir, “Santitos” fue mi elección, qué mejor que unas imágenes de Tlacotalpan para relajarme. Una vez que la protagonista deja Veracruz para ir a Tijuana (en busca de su hija) me fui a la cama, fue cuando recordé.

Es la segunda vez que veo esta película, la primera fue hace exactamente 10 años, el 9 de octubre de 1999, en el cine, con mi hermana. Al terminar la función fuimos a casa, ella quería visitarlo ya que su salud se había deteriorado aún más desde que ella se mudó. Llegamos a una casa vacía, él había ido a su cita con el médico. Todo era normal hasta que mi abuela volvió sin él… “Se quedará en observaciones por unos días”… en cuanto escuché sus palabras por alguna razón supe que él no volvería…

Lloré como nunca antes.
Lloré como lloro cada vez que recuerdo ese momento,
como lloro hoy sobre mi almohada, como lloro cada octubre bajo el cielo azul,
como lloro hasta quedarme dormida esperando despertar y descubrir que todo ha sido un mal sueño, esperando poder oír su voz,
como lloro por su egoísmo al no aferrarse a mí, y por mi egoísmo al no dejarlo ir;
como lloro por la vida que no viví a su lado y por la que vivo sin poder compartir con él.

Hoy lloro esperando que se acaben las lágrimas y que el dolor de volar con alas rotas se detenga… pero eso no sucederá.

Creo que debí haber apagado la televisión antes de recordar, antes de empezar a llorar.

Friday, September 25, 2009

Tuve un sueño... (Parte 1)

En el que Romo no tenía nada que ver con los Vaqueros.....

Thursday, September 10, 2009

Hoy 10 de septiembre

Comienza la temporada regular de la NFL... el ayuno por fin se rompe. Esperemos que el ánimo mejore.

Wednesday, September 9, 2009

...

Definitiva e irremediablemente vivo en el fondo del abismo y no creo poder salir de él... al menos no en el futuro cercano...

Friday, September 4, 2009

Esperar...

Por el momento es lo único que queda por hacer… mientras tanto, seguiré explorando los abismos de otros.

Quizá algún día pierda, al menos un poco, el temor a explorar el propio o a descubrir que en realidad vivo en él.


Thursday, July 16, 2009

Hoy sería su cumpleaños número 52...

... y aún después de casi 10 años, sigo esperandolo, sigo extrañándolo...

No podría negar que ésta, podría entrar en el "Top 5" de las semanas más difíciles de mi vida; ¿sería posible desaparecer del mapa al menos por unos minutos para tomar un respiro?, al fin y al cabo el mundo sigue girando, ¿no?
Curiosamente, tanto ayer como hoy el cielo ha sido azul y la mañana muy fresca...

Wednesday, July 15, 2009

24/05/1979 - 14/07/2009

Siempre llegaba entre 8.00 y 8.30 a la clase de 7.30, apenas cruzaba la puerta comenzaba a “participar” y no se callaba sino hasta que terminaba la clase. Al principio nos desconcertaba un poco esa dinámica, pero no tardamos mucho en acostumbrarnos a pasar la mitad de la clase en silencio y la otra mitad escuchando su voz... nos enseñó que la puntualidad no lo es todo en la vida.

Cuando nos organizábamos para reunirnos en algún lugar a determinada hora, sabíamos que debíamos considerar la media hora que nos haría esperar… nos enseñó a ser flexibles y tolerantes.

Éramos el equipo perfecto en clase de Historia de México, yo redactaba las reseñas de las lecturas tratando de reducir la cantidad de páginas a estudiar y ella era la voz del equipo al participar en clase alargando el discurso hasta donde fuera posible para obtener la mayor cantidad posible de puntos por participación… Me enseñó una nueva perspectiva de los conceptos minimizar y maximizar.

Aunque compartimos salones de clases antes, durante y después de la huelga, nuestra amistad no se limitó a nuestros años de estudiantes, ha sido parte importante de mi vida durante los últimos 12 años.

El suyo ha sido, hasta el momento, el único examen profesional (de mi generación) al que he podido asistir…

Eran cerca de las ocho de la noche cuando llegué a casa, apenas abrí la puerta escuché el teléfono, era Ulises. Generalmente, cuando llama se escucha una voz alegre al otro lado del teléfono, pero estaba más serio que de costumbre… llamaba para avisarme que después de difíciles meses de tratamiento, había fallecido.

Aún sabiendo que estaba enferma es difícil asimilarlo, se veía bien, se oía bien; así que hasta cierto punto la noticia nos tomó por sorpresa. Fuimos llegando poco a poco, las reuniones de despedida duelen.

Hoy no podía despertar, no quería levantarme de la cama, no logro concentrarme, hoy me siento fuera de lugar, un tanto perdida, con un hueco irreemplazable en el corazón.

Extraño a mi amiga... duele…

Hace algunos años, mientras platicábamos, se escuchó en el radio "Nothing's gonna stop us now" de Starship, ella empezó a cantar y me dijo que le encantaba esa canción. Desde entonces cada vez que la escucho me acuerdo de ella, de la emoción con la que la cantó ese día, la misma emoción con la que vivíamos...

Thursday, July 2, 2009

P / A

En 1985 creía que mi vida cambiaba radicalmente ya que, aunque estaría en la misma escuela en la que había pasado los últimos (y hasta entonces únicos) cuatro años de mi vida escolar, estaba a punto de enfrentarme a un mundo totalmente nuevo y desconocido; primero de primaria representaba para mí el mayor reto que podía existir: mucha tarea, un horario de clases más extenso, nada de plastilina para hacer pitufitos, seis enormes y peligrosos escalones hasta la cooperativa y la maestra Laura, mejor conocida por los terribles gritos que se escuchaban en su salón de clases.

Conforme pasaron los años las cosas fueron cambiando, yo estuve en otra escuela durante casi tres años y al volver me di cuenta de lo diferentes que eran las cosas (aún cuando el destino nos colocaba nuevamente frente a la gritona maestra Laura y volvía a compartir mis mañanas con las amigas que conocí durante kinder y preescolar), ahora yo era la niña nueva de la escuela a pesar de haber estado en ella durante casi 7 años. Ella seguía ahí, y aún cuando yo venía de un lugar en el que el ciclo escolar estaba más avanzado, siempre estaba varios pasos adelante de mí, parecía saber y entender absolutamente todo sin complicaciones ni grandes esfuerzos… comencé a admirarla, a sorprenderme por su capacidad de aprender todo, y ese fue sólo el comienzo.

Han pasado más de 20 años desde entonces y aún sonrío al verla, aún me sorprendo con su forma de ver y asimilar el mundo, aún tenemos largas y agradables conversaciones sobre todo y nada al mismo tiempo, aún es parte importantísima de mi vida –tal como lo era en aquellos años de primaria-, aún marca la pauta y la diferencia, aún compartimos el “lunch” aunque sólo sea una vez por semana, aún me emociono con sus alegrías y se me arruga el corazón cuando ella está pasando por un mal momento. Hemos reído y llorado juntas, pasamos de platicar de “Saved by the Bell” a reírnos con “The Big Bang Theory”, de hacer mapas para la clase de geografía a platicar sobre nuestras vidas laborales, de quejarnos del uniforme a quejarnos de los tacones, de compartir el sandwich del recreo a compartir un café o helado y conversar hasta quedarnos dormidas... hemos compartido nuestros días felices y nuestras decepciones amorosas… ella es de las pocas personas que conocen bien a mi “yo”, mi “otro yo” y mi “no yo”, que conocen mi pasado y comparte mi presente tal como es… tal como soy, sin poses ni carátulas.

Tener la oportunidad de compartir mi mundo con ella, ha sido uno de los más grandes regalos que la vida me dio, me ha dado ánimo y brindado su apoyo en los momentos difíciles, ha sido un gran ejemplo a seguir, una prueba de que se puede hacer todo –o casi todo- lo que uno quiere… es una de las personas más brillantes, auténticas, cálidas y divertidas que conozco.

Su amistad es un honor y un tesoro que guardo en el corazón, espero algún día poder retribuir de alguna forma todo lo que Ella ha sido y significado para mí.

“… I'll be there for you, when the rain starts to pour. I'll be there for you, like I've been there before. I'll be there for you, cause you're there for me too.
You're still in bed at ten, the work began at eight. You've burned your breakfast, so far, things are going great. Your mother warned you there'd be days like these, but she didn't tell you when the world has brought you down to your knees that, I'll be there for you, when the rain starts to pour. I'll be there for you, like I've been there before. I'll be there for you, cause you're there for me too.
No one could ever know me, no one could ever see me. Seems like you're the only one who knows what it's like to be me. Someone to face the day with, make it through all the rest with, Someone I'll always laugh with, even at my worst, I'm best with you…”




Wednesday, May 13, 2009

P / PP

Dices que ya no te quiero igual, que antes era más linda, que antes te apapachaba más.... no podrías estar más equivocado...

My love
I’ll never find the words, my love
To tell you how I feel, my love
Mere words could not explain
Precious love
You held my life within your hands
Created everything I am
Taught me how to live again

Only you
Cared when I needed a friend
Believed in me through thick and thin
This song is for you
Filled with gratitude and love

God bless you
You make me feel brand new
For God blessed me with you
You make me feel brand new
I sing this song cause you
Make me feel brand new

My love
Whenever I was insecure
You built me up and made me sure
You gave my pride back to me
Precious friend
With you I’ll always have a friend
You’re someone who I can depend
To walk a path that never ends

Without you
My life has no meaning or rhyme
Like notes to a song out of time
How can I repay
You for having faith in me
Eres lo máximo!! Sólo estoy en una fase de leve depre...
Te amo
Te amo
Te amo

Monday, May 11, 2009

De cuentos de hadas y otras madres

Parecía un domingo como cualquier otro, en el que debería seguir mi ritual semanal: tirar la basura, darme un baño, ir al mercado y preparar la comida que necesitaría el resto de la semana… pero había un detalle inusual: era el día de las madres. Al principio me asustaba la idea ya que la depre ha rondado muy de cerca, así que rompí la rutina de ama de casa y traté de ser la “Yo” que tanto extraño.

Me levanté un poco tarde, encendí la TV y pasé dos horas viendo programas “para niñas”, fui al mercado a comprar algo para comer esa tarde y al regresar me limité a realizar las labores indispensables para sobrevivir en la semana, “total, tengo muchas latas de atún”, pensé.

Tomé un largo baño con agua tibia, me puse un vestido y abrí mi propia Caja de Pandora, aunque esa es una historia que dejaré para mejor ocasión. Poco después volví a la sala y busqué algo entretenido en la TV; encontré una película en la que, para no entrar en detalles innecesarios, había un hombre viudo, lleno de deudas, con siete hijos que volvían loca a cada niñera que pretendía trabajar con ellos, una criada que intentaba mejorar su lectura practicando con cuentos de hadas y una tía aristócrata que apoyaba económicamente a esta familia a cambio de que le cumplieran algunos caprichos. Como en el caso de Mary Poppins – pero sin canciones de trabalenguas -, llega una niñera mágica a cambiarlo todo, a llevarle felicidad a esos siete niños que extrañan a su madre y alivio a su atormentado padre.

El detalle que hizo especial para mí esta historia, fue que al final las imágenes eran un tanto opuestas a los típicos cuentos de hadas; era un cuento más, basado en otros ya muy conocidos, pero rompiendo algunos de los clichés que tanto odio. Justo en el momento en el que todo empieza a cambiar, para tener un final feliz, el azul cielo se vuelve gris y la nieve empieza a caer cubriendo con una capa blanca todo lo que hasta minutos antes estaba lleno de colores intensos.
La criada, que para ese entonces ya es una dama refinada gracias a la loca tía, comienza a caminar hacia el altar mientras a cada paso su vestido azul se convierte en un bello traje de novia; con ello se convertiría en la madrastra de los siete pequeños, quienes hasta ese momento habían evitado a toda costa que su padre contrajera nupcias ya que toda evidencia conocida por ellos hasta ese momento (claro, los cuentos de hadas que leían), indicaba que las madrastras eran brujas terribles a las que debían temer. La niñera, cuyo trabajo ha concluido al educar a los niños y lograr que vuelvan a tener una familia feliz, vuelve al lugar desconocido del cual llegó, nada que no fuera de esperarse.

Yo, por mi parte, paso el día de las madres sentada junto a mi pequeña hija, viviendo en un cuento en que la madrastra ha sido una de las más grandes bendiciones de mi vida y a quien con orgullo y desde lo más profundo de mi corazón puedo llamar “mamá”, esperando que no sólo el final, sino todo este cuento, esté lleno de días lluviosos y grises.

En un 28 de abril, pero de...

1979
Mis padres acudirían a una fiesta, según una carta que hace no mucho encontré aún celebraban su primer aniversario y esperaban la llegada de un niño… pero llegué yo.

1980
Mis recuerdos se limitan a una foto. Yo en los brazos de mi madre y un pastel de cumpleaños de 3 pisos a mi lado, mi padre al otro lado de la cámara y mucha gente alrededor… Pepe tenía un mes y once días de nacido y aún no sabíamos que algún día nos conoceríamos y estaríamos juntos

1982
Un lindo traje a cuadros y zapatos de charol, mi camisa blanca y dos coletas, un pastel que medía lo mismo que yo, un payaso que me hizo llorar.

1983
Mi madre decidió hacer “algo pequeño” así que el pastel tuvo sólo 2 pisos y la pequeña lista de invitados se redujo a 50 personas… y luego me preguntan de dónde heredé la idea de hacer fiesta en grande.

1984
Mi abuela me hizo un vestido amarillo que me encantaba, muy primaveral; lamentablemente mi tía me aventó al pastel al morderlo y el vestido quedo irreparablemente arruinado. Ese año aprendí por qué siempre teníamos pasteles enormes, era la única forma en que los invitados recibían una rebanada a pesar de las salvajadas de mi tía.

1985
Me prepararon algo a la hora del recreo en la escuela. En casa fue un tanto distinto, mi mamá horneó un pastel en forma de gallina, habíamos visto la receta en una revista y a mi me llamó mucho la atención, hizo hasta lo imposible para que no me diera cuenta y fuera una sorpresa.

1987
Mi primer cumpleaños lejos de la gente que conocía, en una nueva ciudad, nueva casa. Ese año decidí que no quería más fiestas durante el resto de mi vida, al anunciar tal noticia todos se rieron de mí… el tiempo les daría la razón.

1988
Por primera vez en toda mi vida, sólo quería estar en casa con mis papás; pasé la tarde con mamá comprando un pequeño pastel, mi papá me obsequió un reloj que, por no ser de manecillas, me dio tremendos dolores de cabeza. Fue el último que estuvimos juntas.

1989
De regreso en el Distrito Federal. Nuevamente un pastel enorme y mucha gente… pero nada llenaba ese vacío.

1994
Me enojé, me indigné, lloré y supliqué… y lo logré. No hubo fiesta de “XV Años”, sólo quince rosas que papá me compró.

1995
Mis amigos me organizaron una fiesta “sorpresa” de la cual estuve enterada todo el tiempo. El truco era lograr el permiso para regresar a casa hasta el siguiente día.

1996
No recuerdo bien el festejo… pero moría por cumplir 17.

1997
Llegó la mayoría de edad, yo estaba más preocupada por “el juego del domingo”… memorable, gran pelea linces – cóndores. Resultado: expulsaron al entrenador y a la mitad del equipo por agresivas. Una semana después un volado decidiría la licenciatura que cursé.

1999
En plena huelga, sin clases, frustrada con el dolor de dientes por los bracketts. Mi regalo: una playera con un tiburón, papá decía que era mi foto… Fue el último a su lado.

2000
De regreso en la universidad. Una noche antes Pedro llamó, debí sospechar algo ya que nunca llamaba, platicamos durante más de dos horas de cosas sin mayor importancia hasta que dijo: “Bueno, son las 12.00 de la noche y por fin puedo decirte que sólo llamé para desearte un feliz cumpleaños”, al día siguiente mis amigos organizaron una fiesta-sorpresa-relámpago en un salón de clases.

2001
Por primera vez organizaba mi propio festejo, una comida en casa con mis amigos más cercanos.

2002
¡Qué buena peda! Una fiesta inolvidable, la más grande en muchos años… Tardé tres días en limpiar la casa.

2003
Después de dos meses con la pierna inmovilizada y de vacaciones forzosas, mi vida volvía a la normalidad de la rutina. Los compromisos laborales limitaron mi festejo a una pequeña reunión en casa.

2004
Como fiesta de pueblo, empezamos en una cantina el viernes, seguí con una comida “familiar” y varias pequeñas reuniones con algunos amigos en los días siguientes.

2005
“Cuando cumpla 30 para festejar me iré en un crucero a Alaska”
2006 y 2007
Fiesta en casa!!! Lo mejor de todo: planearla, invitar a la gente, organizar todos los detalles, recibir en mi casa a la gente que quiero y que quiere compartir ese día conmigo. Nota mental: “En lugar de crucero, mejor organizo una gran fiesta… una kermess!”

2008
Mi yo, mi otro yo y mi no-yo. Después del día del trabajo, del día de las madres, día del maestro y demás, pude tener mi fiesta de no-cumpleaños gracias a mi Comité Organizador. Puedo decir que ha sido de las mejores. Fue el primero con Pepe.

2009
Parte 1
Todo iba viento en popa hasta que la crisis llegó a mi bolsillo y los sueños de kermess se fueron volando por la ventana. Nota mental: “No importa, festejaré con fiesta en casa”

Parte 2
¡Estúpida epidemia!

No hubo fiesta, ni viaje, la vida da muchas vueltas y siempre cambia mis planes; no obstante, puedo decir que hubo cosas que hicieron mi día inolvidable:

* Una lujosa comida con Ana y Lore en una jardinera de la plaza comercial, fue muy divertido marcar la tendencia en cuanto a “lugares para comer” en tiempos de contingencia.

* Muchas llamadas de gente para felicitarme, en especial la de esa personita a quien quiero con el alma aunque esté a miles de kilómetros de distancia, ¡Gracias Dany!

* La cena en casa con Pepe (claro, después de ir al súper a comprar víveres para sobrevivir en caso de que la situación empeorara), me encantó el detalle… y la ensalada… y la pasta… y el perro salado “virgen” mientras él cocinaba.

* Las vacaciones forzosas por contingencia.

Conclusión: A pesar de todo... ¡Me encanta mi cumpleaños!

Tuesday, April 28, 2009

1979 - 2009

"The child is grown, the dream is gone
and I have become....Comfortably numb"

Wednesday, April 8, 2009

I can't stop thinking about you... missing you... needing you.
I woud do anything just to see you again.
It still hurts.

Friday, February 20, 2009

Hace muchas noches que no tengo tiempo para leer o para escribir, ni siquiera para cocinar algo nuevo... ahora entiendo porque muchos abogados son tan incultos....

Llega el fin de semana acompañado de muchas tareas por realizar, casos por resolver, labores domésticas por atender; espero -es más que necesario- poder tomarme unos minutos para escribir todo aquello que tengo pendiente.

Wednesday, January 21, 2009

529 días después… (enero 20 de 2009)

Al principio, como en cuento de hadas, todo era miel sobre hojuelas... emoción al máximo con una simple llamada para decir buenos días, largas pláticas por teléfono cada noche, ilusiones sobre un futuro que esperaba no fuera tan incierto en ese momento.

No sé cómo ni cuándo pasamos de hacer un análisis de cada equipo a ver alguno de los partidos mientras preparo la comida, de soñar abrazados a intentar que los peques se queden quietos (en medio de los dos) y nos dejen dormir; las cosas cambiaron mucho y ese color rojo encendido fue perdiendo intensidad. Hoy nos envuelve la rutina, el cansancio, la vida laboral, el correr en las mañanas para llegar a tiempo. Hoy no surten efecto sus chistes cuando estoy molesta, el día no cambia con sólo oír su voz, ahora es necesario planear y organizar bien el poco tiempo que tenemos libre.

Las relaciones son en general sumamente complicadas, consumen tiempo, espacio y una cantidad tremenda de energía que uno bien podría utilizar en algo productivo como leer un buen libro, estudiar o practicar algún deporte. Hoy soy (aún más) consciente de cuánto detesto ver sus zapatos a la mitad del pasillo, de la pila de ropa sucia junto a la cama, de sus ganas de ver TV cuando necesito ir al super, de que no dejará de jugar con los peques para ayudarme a limpiar. He incluido en mi lista de actividades los desvelos para ver alguna película aún cuando los ojos se cierran como si tuvieran voluntad propia, en mi lista de compras figuran sus M&M’s, un “Hot Wheels”, premios para Corso y su botella de agua.

Es impresionante cuánto ha influido en mi vida cotidiana, cuántas cosas he dejado de hacer y cuántas más he empezado. De vez en vez me siento a su lado a ver algún partido del Manchester United aunque odio el soccer, escucho sus historias de basquetball aunque pareciera que habla en chino y he aprendido a identificar a las chicas que conforman su “lista”. Me he vuelto fan de Seinfeld, de Héroes, de los hermanos Cohen y de Woody Allen. Beirut se ha incorporado a la pequeña selección de discos que siempre están en el auto para ayudarme a sobrevivir al tránsito matutino.

Hace poco empezaba a hacer una lista de aspectos positivos y negativos de la relación. Sólo podía pensar en lo desgastante que puede ser (a veces lo es) y en que si no se tratara de él, si fuera cualquier otro individuo, no estaría dispuesta a seguir adelante en esta aventura, aprendiendo, divirtiéndome, arriesgándome a vivir al ritmo del latido de mi corazón. Después del período de miel sobre hojuelas siempre hay dos escenarios posibles: la relación termina o evoluciona. Llegué a la conclusión de que en este punto no pesa tanto lo que he hecho o dejado de hacer por seguir con él, es lo que juntos hacemos, inventamos o descubrimos… es evitar reproducirnos por temor a que nuestros hijos sean una mezcla de Sheldon Cooper y Pablo Boullosa (aunque en el fondo nos gustaría que así fuera), es tomar juntos el helado de los jueves mientras imaginamos los cambios que haríamos en los Vaqueros de Dallas para llevarlos al Super Tazón… es sentir cómo se acelera mi corazón cada vez que nos tomamos de la mano.

Thursday, January 8, 2009

Ayer me sentía frustrada por una entrada que no había podido publicar, esta frustración se debía principalmente a que la entrada en cuestión se trataba de algo que necesitaba desahogar, que tenía hecho nudo en la mente y quería dejarlo salir de alguna forma. Afortunadamente logré rescatar una copia del archivo, aquí está mi entrada de Día de Reyes:

"Hoy de plano mi ánimo anda por el subsuelo, por una parte llevo 6 días tratando de armar este blog y la tecnología pareciera resistirse a trabajar con mi computadora, es sumamente desgastante, (a punto estuve de abortar la misión y mandarlo al nabo, afortunadamente –y por primera vez en la historia- mi paciencia hizo acto de presencia y evitó que utilizara el martillo para terminar con la cada vez más dolorosa y complicada vida de mi PC) por otra hoy ha sido un día particularmente nostálgico.

Es increíble como la ola de optimismo con la que empecé el año se fue alterminar las vacaciones, si es que se le puede llamar así a los dos días en queno fui a trabajar. A veces de verdad quisiera ser como Hiro Nakamura y detener el tiempo o quizá volver unos años atrás a la época en la que en esta fecha sólo me preocupaba por los juguetes y regalos que “mágicamente” aparecerían bajo el árbol de Navidad.

Aunque parezca increíble e incluso ridículo, este fue el primer año que en casa no hubo árbol de Navidad, cena o festejo alguno; tampoco hubo regalos ni cartita de parte de los Reyes Magos y eso sí que dolió, pero dolió por el vacío que deja la ausencia de ilusiones y de ese no se qué que a falta de mejor término denominaré “magia”. No es que sea toda una fanática de estas fiestas, es simplemente que logran lo que pocas cosas en la vida: conectarme con la niña que fui, esa niña que creía que todo era posible con sólo desearlo decorazón... Hoy los deseos y los sueños son mucho más difíciles de realizar, así debe ser y eso me queda claro, pero me gusta y disfruto bastante tener cuatro años nuevamente al menos durante las 24 horas que dura el 6 de enero, por eso me resulta difícil pasarlo sin ese alguien que con sólo tomarse unos minutos en la noche me hacía sentir magia al dejarme una cartita en el zapato."

Wednesday, January 7, 2009

6 de enero

Es frustrante cuando las cosas no salen como uno las espera, tenía una entrada para este "Día de Reyes" y no logro abrir el archivo... es una tarde complicada, con muchas actividades y asuntos pendientes, así que mañana será otro día y espero poder publicar mi entrada aunque sea con un poco de retraso.

Ni hablar, como diría mi abuela: "así pasa cuando sucede".

Segunda oportunidad y ocho por avanzar ... o todo sería mejor si tuviera un soplete.

Ese es el resultado de la primera jugada.

Para empezar me dolía la espalda y aún no entiendo el por qué, moría de sueño y había olvidado un ingrediente, pero estaba decidida a terminar lo que empecé. Al final del día tendría mi primer Brulée de Fresas o moriría en el intento.

Creo que no salió nada mal para ser la primera vez. Para comenzar se parecía bastante (digamos en que en un 90%) al que aparecía en la fotografía del libro, el delicioso olor proveniente del horno desaparecía poco a poco y me arrancaba la primera sonrisa de la tarde, mientras el refrigerador hacía lo suyo; sin embargo, debo reconocer que no me agradó del todo, la crema se calentó demasiado y perdió un poco de consistencia aunque sin sacrificar su dulce y suave sabor.

Bien podría decir que avanzamos por lo menos dos yardas por tierra, nada arriesgado pero hacia delante.

Nota para la próxima vez que repita la jugada: creo que sería bueno sacar del campo al horno y sustituirlo con un soplete.

El primer día del resto de mi vida

Es primero de enero, un nuevo año. La mayoría de las personas que conozco dedica este día en particular a realizar actividades que representen de alguna forma lo que esperan del resto del año, en cambio para mí es el día del descanso, de la televisión, de los tazones colegiales, de vivir en pijama con el control remoto de la TV en una mano y un pedazo de pizza en la otra. Es el día de hacer una pausa en el estrés de mi vida cotidiana y escapar a un mundo en el que puedo ser y hacer lo que quiera, de imaginar –como lo hacía cuando era niña- lo que quiero ser de grande. Es difícil hacerlo cuando los 30 se acercan y la vida no ha dejado de dar vueltas ni de sorprenderme con situaciones extraordinariamente bizarras que bien podrían ahuyentar al soñador más perseverante.

Asi que, aunque por mi mente no cruzan ideas sobre ser astronauta ni bombero, sigo buscando la forma de ser feliz, de levantarme cada día con una sonrisa porque disfruto mi vida, sigo buscando la forma de reinventar lo que soy y encontrar la forma de dejar atrás todo lo que pudiera atentar contra esa felicidad.

Hace algunos días buscaba la forma de dejar absolutamente todo y fugarme a cualquier lugar desconocido, en donde no exista la presión de las expectativas de la gente sobre mí, donde no tenga nada que perder y sí un mundo diferente por conocer, donde pueda encontrar un rumbo distinto para mi vida, uno que pueda elegir yo, uno que no sea impuesto por las circunstancias. Pensando e imaginando cuál sería ese paradisiaco lugar, mi mente viajó en el tiempo y el espacio hasta encontrar aquel momento en que mis sueños se empezaron a formar, un punto difícil de definir pero situado entre el aroma del café y la canela, sobre una mesa de trabajo metálica cubierta de harina, huevo y leche, en los días de cielo azul y aire frío, en aquellos domingos en los que mientras mi mami compartía conmigo el secreto de sus recetas, mi papá me clavaba en el corazón el amor por el football al narrar cada partido en términos que cualquier pequeña de 5 años pudiera entender.

Me dí cuenta de que mi felicidad no está más allá de mi cocina (lo cual resulta bastante conveniente en lo que a mudanzas se refiere) y que no necesariamente debo dejar todo e irme lejos, sólo debo dar pequeños pasos, pero firmes.

Hoy, puedo decir que ha llegado el momento de -realmente- empezar a jugar a mi manera; aunque perdí el volado y mi línea defensiva fue la primera en salir al campo, el equipo contrario no hizo daño irreparable alguno, aún hay tiempo suficiente para recuperarme y poner el marcador a mi favor.

Hoy es el primer día del resto de mi vida, tengo el balón en mis manos y cuatro oportunidades para avanzar... el partido apenas comienza y por el momento sólo debo preocuparme por las siguientes 10 yardas.

Primera jugada: Brulée de fresas.